Tarija: La tragedia de Don Carlos y sus dos pequeños nietos

Don Carlos Carita Huaquisaca de 73 años es un comerciante ambulante de autopartes que se ganaba la vida vendiendo en las estaciones de servicio de Tarija, trabajo que le servía para mantener a sus dos nietos huérfanos, pues él se quedó a cargo de ellos, luego de que el padre de los menores fuera encontrado muerto en el fondo de un barranco por la zona de la nueva terminal. Ahora la situación del anciano es crítica, pues la vivienda que construyó con el fruto de su trabajo en el barrio Arsenio Ortiz Mealla, fue demolida.

De acuerdo al relato de Carlos, en el año 2011 compró el terreno para poder construir su vivienda, en ese entonces contaba con el apoyo de su esposa y de su hijo. Más aún, con el pasar de los años la familia pudo edificar un hogar.

Lamentable en el año 2018, el hijo de don Carlos fue encontrado muerto en el fondo de un barranco en la zona de Torrecillas a la altura de la nueva terminal de buses, esto para el padre del fallecido fue muy difícil de asimilar, pues la muerte no fue aclarada por las autoridades a cargo de la investigación.

"Mi hijo no tenía enemigos, todo es raro porque fue encontrado en el fondo de un barranco, como si lo hubieran ido a botar ahí. Desde ese día mis nietos de 13 y 7 años se quedaron huérfanos", relató.

Sin duda este fallecimiento, fue un golpe muy duro para la familia Carita, les costó superarlo, pues además de esto la situación económica de los integrantes se vio afectada, por tal razón la esposa de Carita tuvo que irse al Brasil a trabajar para ayudar al sustento del hogar.

Después de la pandemia por el coronavirus en el año 2019 y 2020, la situación fue aún más crítica para don Carlos, pues la venta de sus productos no generaba suficientes ganancias para mantener su hogar que a la vez, empezaba a verse en riesgo, pues la Dirección de Ordenamiento Territorial (DOT), comenzaba a proyectar la construcción de una avenida que precisamente tenía el lineamiento sobre la vivienda del anciano.

Después de cuatro años, el comerciante comenzó a recibir notificaciones para desalojar la vivienda, pues los funcionarios le advertían que iban demolerla, situación que no fue aceptaba por don Carlos porque él consideraba que había comprado de manera legal el terreno.

"Tengo todos los documentos de mi vivienda, pago impuestos y también hay un plano aprobado, jamás nos dijeron que iba a pasar una avenida por mi casa, no sólo soy yo, sino también son varios los afectados pues son como 12 viviendas que pretenden ser demolidas", mencionó.

Pese a la negativa de los habitantes del inmueble, la DOT procedió a la demolición el pasado 5 de noviembre cuando don Carlos se encontraba en el Brasil cuidando a su esposa que se encontraba internada por problemas de salud.

Al llegar a la ciudad de Tarija, el anciano se sorprendió al ver que el fruto de su trabajo fue destruido, pues no quedó nada de la vivienda y pese a esto, también perdió el capital de los artículos que vendía de manera ambulante.

Ahora la situación de Carita es crítica, pues se quedó sin un techo, vive en una carpa junto a sus dos pequeños nietos, no cuenta con el capital, ni tampoco puede volver a vender sus artículos, porque peregrina a diario por ayuda para que no le quiten el terreno, que es lo único que le queda.